Sistema educativo polaco
La educación en Filipinas se imparte en escuelas públicas y privadas, institutos, universidades e instituciones técnicas y de formación profesional del país. La financiación de la educación pública proviene del gobierno nacional. Para el año académico 2017-2018, alrededor del 83% de los estudiantes de K-12 asistieron a escuelas públicas y alrededor del 17% asistieron a escuelas privadas o fueron educados en casa.
Con la «trifocalización» del sistema educativo en el país, tres organismos gubernamentales se encargan de cada nivel educativo. En el nivel de educación básica, el Departamento de Educación (DepEd) establece las normas educativas generales y ordena la realización de exámenes estandarizados para el sistema de educación básica K-12, aunque los centros privados suelen tener libertad para determinar su propio plan de estudios de acuerdo con las leyes vigentes y la normativa del Departamento. En la enseñanza superior, la Comisión de Enseñanza Superior (CHED) supervisa y regula las facultades y universidades. Por su parte, la Autoridad de Educación Técnica y Desarrollo de Competencias (TESDA) regula y acredita los programas e instituciones de educación técnica y profesional del país.
Educación en Inglaterra
Hay dos formas de educación postsecundaria. La primera conduce al título de técnico superior tras un periodo de 1 a 2 años que conlleva también el derecho a matricularse en la universidad. Los alumnos que hayan cursado estudios de bachillerato pueden acceder directamente a cualquiera de las 59 universidades españolas siempre que superen una prueba de acceso. Aquí pueden cursar una gran variedad de estudios, desde programas de un año hasta doctorados.
La institución terciaria más venerable de España es la Universidad de Salamanca, la tercera más antigua del mundo. Data de 1134, aunque no recibió el Fuero Real hasta 1218.
Ministerio de Educación España
La educación en España está regulada por la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa (LOMCE) que desarrolla el artículo 27 de la Constitución Española de 1978[1] El sistema educativo español es obligatorio y gratuito para todos los niños entre 6 y 16 años y está sostenido por el gobierno nacional junto con los gobiernos de cada una de las 17 comunidades autónomas del país.
En España, la educación primaria y la secundaria se consideran educación básica (obligatoria). Se trata de Primaria (6-12 años), que es el equivalente español de la escuela elemental y el primer año de la escuela media, y Secundaria (12-16 años), que sería una mezcla de los dos últimos años de la escuela media y los dos primeros años de High school en Estados Unidos.
En 2020-21, España cuenta con 9.909.886 alumnos. El grupo más numeroso corresponde a la educación primaria, con 4.654.727 estudiantes, seguido de la educación secundaria, con 2.730.036, y los universitarios, con 1.633.358. El grupo más pequeño es el de la formación profesional, con 887.710 alumnos[4].
Sistema educativo en Turquía
ResumenEn los últimos 50 años, algunas reformas importantes en países europeos tuvieron como objetivo mejorar el sistema de estudios profesionales. Por el contrario, la ley educativa española (LOGSE) de 1990 avanzó en la dirección contraria. Si bien la LOGSE aumentó el número de años de escolarización obligatoria de 8 a 10, también eliminó los estudios profesionales de primer grado (FP-I, de 14 a 16 años), reduciendo así la flexibilidad. La LOGSE se implantó en distintos momentos en las distintas regiones españolas. Esto se utiliza como estrategia de identificación para analizar si el cambio de ley contribuyó a detener la tendencia descendente de las tasas de abandono escolar observada en las dos últimas décadas (bajaron del 70% en 1977 al 30% en 1995, pero se mantuvieron en torno al 30% hasta los últimos años, el doble que la media de la UE27). Los resultados muestran que la nueva enseñanza secundaria obligatoria aumentó las tasas de abandono de los hombres y las redujo de las mujeres. Por otra parte, la supresión de la formación profesional inferior tuvo un efecto negativo para ambos sexos, siendo mayor para las mujeres. Por último, al reducir las oportunidades de elección de itinerario para los estudiantes, la reforma redujo la probabilidad de seguir el itinerario profesional una vez finalizada la etapa obligatoria.Códigos JELI20, J24.